La cofundadora de Degreed y ex CLO de LinkedIn, Kelly Palmer, pone de manifiesto la importancia del upskilling y reskilling a lo largo de toda la vida profesional de las personas y, de hecho, es elevado el porcentaje de los trabajadores que lo necesitan dentro de sus organizaciones. Según ella, no es una cuestión de solo reaprendizaje, sino de seguir aprendiendo nuevas habilidades que se requieran para el futuro o de mejorar las competencias actuales para continuar teniendo éxito y siendo relevante en la compañía. Hemos de ser conscientes de que cualquier ámbito de trabajo va a sufrir cambios y, para ello, es necesario pensar en cómo mejorar las habilidades y competencias, no ya de manera individual, sino a nivel de organizaciones y gubernamental. Por su lado, el miembro de la Junta y director de Aprendizaje, IE University y ex CLO de McKinsey, Nick Van Dam, afirma que existe una ingente necesidad de ayudar a las compañías a prepararse para el futuro y para que puedan desarrollar y proporcionar herramientas que faciliten el upskilling y reskilling a sus trabajadores. En las próximas décadas, todas las compañías van a enfrentarse a una transformación digital masiva retadora. En este sentido, lo que hace que una transformación digital tenga éxito es conseguir que tanto sus líderes como los trabajadores estén digitalmente preparados, además de modernizar prácticas obsoletas. La próxima década traerá consigo, por un lado, grandes oportunidades para quienes tengan la mentalidad, habilidades y competencias correctas, pero, por otro lado, supondrá un gran reto para quienes no lo tengan. Es optimista y ve muchas oportunidades por parte de las compañías para ayudar a sus empleados en la adquisición de las competencias necesarias, y eso se traduce en que se han de incrementar las prácticas de aprendizaje y desarrollo dentro de las organizaciones. La directora de EDX Europe, Caroline Mol, considera que la responsabilidad del reskilling y upskilling no solo recae en las empresas y en el individuo, sino en naciones o gobiernos. Ha sido testigo de un cambio de colaboración entre la industria y las instituciones académicas para dirigir esta brecha de competencias.
Durante la mesa redonda, se tratan puntos como en quién cae la responsabilidad del upskilling and reskilling o que competencias serán necesarias en los próximos años. En este último punto, se habla de soft skills, como colaboración, resolución de problemas, etc, de technical skills como análisis de datos, IA, ciberseguridad, entre otros, learning agility, como es la motivación o curiosidad, o imponer a los trabajadores la mentalidad de la importancia en la adquisición de nuevas competencias para optimizar su desempeño o el reciclaje profesional.
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